Podría rebuznarte. Él y yo.

Uno tan tranquilo. Con su vida planificada. Siendo diferente, asumiéndolo sin pretenderlo. En peligro de extinción y encima blanco entre congéneres de colores pardos y oscuros; en un lugar donde lo que se lleva precisamente son los tonos pardos y oscuros. Preocupándose lo justo para aprovechar el momento que vive. Alimentándose de forma sana con hierbas y verduras casuales sin saber que es vegetariano y que el verano está a la vuelta de la esquina. Sin conocer el rencor, la envidia, la soberbia, la vanidad o la ira. Tan sólo alguna coz de vez en cuando a algún compañero de cuadra.
Y luego otro animal observándole. Con sus miedos, prejuicios, soledades, malos hábitos, con corbata en camiseta y dándole importancia a algo muchísimo menos importante que una zanahoria o un berro. Y creyendo en la comunicación no verbal entre burro y hombre. (Aunque sea una idea redundante, y digo redundante, que más de una y dos veces he leído "rebuznante" o "rebundante". Algo que no tiene nada que ver con el bello arte de la comunicación de los burros que transmiten sus conocimientos de generación en generación, el rebuznarte) Él lógicamente no me entendió aunque le hablé, tan sólo parecía decir: "me aburro". En cambio, yo a él le entendí que no le hiciera fotos, cosa que intuí al verle cómo intentaba comerse mi cámara.

Ventanas

A veces, tras las ventanas, vemos la vida pasar.
En ocasiones, pasamos por la vida viendo las ventanas cerradas de los demás.

A veces somos las propias ventanas con vida a los dos lados.

james

Hace casi 20 años que escuché por primera vez a este grupo. Realmente era el año 90 y uno andaba en los mejores momentos de su adolescencia (esa etapa que empieza en el hombre a eso de los 16 años y nunca se sabe cuando acaba definitivamente). Eran momentos en los que las mayores preocupaciones eran las actividades de Bono (el de U2), el partido que jugabas el domingo a las 9:00am (con 18 años los domingos nunca deberían empezar a esa hora), el servicio militar que rondaba todavía a la gente de mi generación ('73) y alguna moza que nos rondaba el corazón y la bisectriz* de nuestro cuerpo.


Por aquellos tiempos sonaba una canción fantástica por las radios y en algún antro de mal recuerdo que yo entendía que decía algo así como "Bono's frustration, Bono's frustration...". He de decir que dominaba el genitivo sajón como nadie y por este motivo, adaptaba las letras de las canciones sin necesidad de versiones originales o libretos de cd. Además, sabía que U2 estaban en periodo de crisis y todo encajaba perfectamente, "la frustración de Bono...".

Como la adolescencia es época de descubrimientos, un amigo me dijo que aquella canción pertenecía a un grupo llamado James y que se llamaba "Born of frustration" (!). El caso es que el disco donde aparecía la canción estaba lleno de música pop perfectamente hecha, con arreglos originales y una voz andrógina de Tim Booth.

unomismo, Tim y el amigo

James son un grupo sencillo, discretos, sin grandes estruendos, ni obras maestras. Tampoco tuvieron nunca una popularidad masiva, aunque tuvieran cierta repercusión en la escena Manchester y a principios de los 90. Luego nos quedamos algunos que seguimos sus andanzas y su música llena de ritmo, vulnerabilidad e intensidad. Un gran grupo pop que permite bailar y cantar con su música a los que no sabemos bailar ni cantar, pero disfrutamos haciéndolo.

Como en cualquier vida, el grupo ha pasado por infinidad de sucesos internos, desde intentos de suicidio, separaciones, pequeñas alegrías, grandes derrotas, etc, y eso trasciende a su música. Ahora vuelven a tocar por España en Barcelona y Madrid (29 y 30 Abril) y uno que lo es, no se los perderá.

james - Out to get you
Una de las canciones más bellas que he escuchado. "...I miss the outline of your back, miss your breathing down my neck..."

james - Born of frustration


james - say something


Tim Booth - Sometimes


james - tomorrow




(*) Bisectriz.- Así es como definía a los genitales, epicentro sexual o como se quiera definir el gran Baldomero, Baldo o Padre Muro. Profesor y además maestro, amén de cura, valga la redundancia.

La soledad autocrítica

Pensaba esta noche en esa gran desconocida para muchos de nosotros que es la autocrítica, tras unos años de crispación y enfrentamientos políticos (que cada uno otorgue responsabilidades a quien crea oportuno) que han trascendido en la sociedad civil, que somos nosotros. Creo que todas las partes implicadas en este proceso deberíamos hacer una pequeña gran autocrítica; léase medios de comunicación, los propios políticos, asociaciones víctimas de dirigentes ultras, conferencias y ciudadanos teledirigidos. Todos somos responsables de caer en la división, en "los otros", en la polarización, en el rencor que viene de la tradición y las entrañas de algunos subconscientes.

Justamente esta misma noche, antes de entrar en el cine, he asistido a un acto de autocrítica, aunque fuera indirecta. Alguien pidió fuego a un desconocido, a lo que éste contestó: -"no fumo, ni bebo, ni follo". Lo que me pareció una sana autocrítica en público en un principio, me pareció poco después un acto de protesta velada, de exhibicionismo innecesario. Porque, al que quería fuego, buscaba únicamente eso, fuego. Y a él, si su problema es no beber, fumar o follar, ¿qué solución es airearlo?

Esta anécdota intrascendente me recordaba la actitud de algunos políticos y periodistas estos días. Resulta que las elecciones democráticas celebradas recientemente, según ellos, no son totalmente válidas, o al menos, justas. Basados en una gran demagogia intentan justificar la decisión soberana de un pueblo en los votos de extremos radicales (que existen en ambos extremos por cierto), leyes D'Hondt (la cuál me sé al dedillo por si alguien necesita explicación) y un desprestigio del votante que vota libremente una opción diferente a la correcta.
Perdone, ¿qué opina de la derrota electoral de su partido y, por otro lado, cree usted que ha influido su actitud de los últimos cuatro años en ello? - "Yo no fumo, ni bebo, ni follo".

La película era "La soledad". Como la vida misma. Con sus pequeñas explosiones en el corazón de la cotidianeidad. Ligera y a la vez llena de vida. De nuestra vida real si agudizamos un poco la vista. Con la ayuda del recurso de la polivisión, que permite tener dos ángulos de la misma escena a la vez lo que permite ampliar los registros, nos cuenta una historia tan dura como sincera y real. Algo que sería una buena solución para nuestros políticos y algunos de sus fieles.

Siguiendo con estos enlaces imposibles, me acordaba de un vídeo de hace 10 años de U2 que utilizaba la polivisión...

Mujeres

Vivimos por las mujeres. En todos los sentidos de la frase y con todos los sentidos.


Gracias.

Pesadilla. MariaNo Presidente.

La pasada noche tuve una pesadilla con la niña de Rajoy. El hecho de que aparezca Rajoy Division por las madrugadas le confiere a cualquier dulce sueño el carácter de pesadilla. El caso es que por estos procesos que realiza nuestro cerebro mezclando ideas inconexas, imágenes varias y personas conocidas me imaginaba al gran Mariano siendo el padre de la niña protagonista de Juno; adolescente que se queda embarazada y que decide tener a su bebé a sabiendas de que lo criará otra madre. Me imaginaba a Mariano debatiendo sin bate con su hija. La imagen siguiente era Mariano con una niña barbuda en brazos que le insultaba. Me imaginaba a Mariano de muchas formas. Incluso, durante la fase R.E.M. (por asociación directa en la pesadilla me gusta más el nombre inglés que el español MOR -"más" en pronunciación de Opening) de mi sueño, llegué a ver a Mariano Rajoy siendo investido presidente de todos los españoles. En ese momento me desperté con un sudor frío recorriéndome la espalda y la boca seca llena de papeles que resultaban ser votos nulos y abstenciones en forma de hilillos.

A veces las pesadillas parecen reales.

R.E.M.